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Volumen 4 - carta nº 272

De JUAN VALERA
A   MARCELINO MENÉNDEZ PELAYO

Doña Mencia, 14 octubre [1880]

Mi querido amigo D. Marcelino: Aquí me tiene Vd. desde hace muy pocos días y ya con ganas de volverme á Madrid. Esto, visto desde lejos, me parece más ameno y poético que visto desde cerca. Sin embargo, ya que he venido, seguiré por aquí hasta que arregle no pocas cosas que tengo que arreglar.

Como la candidatura de Vd. en la Academia es casi seguro que saldrá triunfante me alegraré de que Vd. vaya, desde luego componiendo su discurso. Yo haré la contestacion en menos que se persigna un cura loco, y así daremos un pasmoso ejemplo de actividad á los demas académicos electos y a todo el mundo.

Espero y supongo que, si Lidia lo permite, irá Vd. de vez en cuando á la Sinagoga. Dé Vd. mil expresiones de mi parte a Mme. Bauer.

Salude Vd. asimismo en mi nombre á todos los que asisten de noche al Museo de Alejandria, donde ya acaso habrá hecho Hipatia su epifania gloriosa de vuelta de Galicia.

Aquí no hay Hipatias, ni Lidias, ni judias elegantes con quien tratar. No hay más que cristianas católicas, feas por lo comun y poco aseadas.

Por la noche tengo tertulia de hombres solos. Vienen los curas, el médico, el boticario, el escribano y seis o siete magnates del lugar. Se juega al tresillo á céntimo de peseta, se habla, ya Vd. comprenderá que no de literatura, y á las once, en vez del té, se toma el aguardiente.

De día, traía yo propósitos de escribir mucho, pero nada he hecho hasta ahora. Veremos si aprovecho mejor los días que aun me quedan que estar aquí.

Escríbame y cuénteme algo de los que por ahí ocurra.

En Cabra he estado tres días. Aquello es bastante agradable, y el tiempo que allí he estado lo he pasado bien.

Estamos en la vendimia y hay cierta util animacion, que no carece de interés para mí.

Adios. Creame su afmo amigo

J. Valera

 

Valera-Menéndez Pelayo, p. 72-73.