La Veleta, Granada, 2013, 76 págs.
Leer bien consiste en no olvidar que debajo de cada frase, de cada palabra, hay una promesa.
Para crecer en lo más profundo siembro lo breve.
El paraíso existe. Cada vez que nos alegramos entramos en él.
La verdad es cárcel cuando es refugio.
Menos el hombre, todas las cosas han aprendido a hablar ocultando que hablan.
Cuanto menos tuve, más me alegró lo que tuve.
Vivimos y caminamos entre la niebla; y si la disipamos, nos disipamos con ella.
Si ves en lo que se ve solo lo que se ve, qué poco ves.
Una verdad grande nunca es del todo toda la verdad.
Como ningún acto tiene fin, toda Historia es imposible.
Para creer en la realidad se necesita mucha imaginación.
Las palabras, fuera de la poesía: carne masticada.
La muerte es un cambio de expresión del alma.
Cualquier sucedáneo de Dios es el diablo.
La máxima lucidez hace su nido al filo de la comprensión.
El alma que agradece, ¿qué podrá mancharla?