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71

Francisco Vindel ha argumentado ingeniosamente que Robles es el amigo mencionado en el prólogo de la primera parte del Quijote, y las Novelas ejemplares: Cervantes, Robles y Juan de la Cuesta (Madrid 1934). Véase, no obstante, A study of «Don Quixote», pp. 100-01, n. 83.

 

72

El inventario de una gran imprenta (que algunos años más tarde sería dirigida por Juan de la Cuesta), la de María Rodríguez de Rivalde, viuda del impresor Pedro Madrigal y novia de otro impresor, Juan Íñiguez de Lequerica, junto con un informe de su valor neto (29.125 reales), puede encontrarse en Pérez Pastor, Documentos, I, 385-95. No era la viuda de Juan Gracián, como he declarado erróneamente en «On editing», p. 28; su viuda era María Ramírez (Pérez Pastor, II, 555-56; VII, 760).

 

73

Véase Henry Thomas, «What Cervantes meant by "gothic letters"», MLR, tomo 33 (1938), 421-26, traducido como «Lo que Cervantes entendía por letras góticas». Boletín de la Real Academia Española, tomo 28 (1948), 257-64, y «An unrecorded sixteenth-century writing book, and more about gothic letters», en Estudios dedicados a Menéndez Pidal, III (Madrid: CSIC, 1951), pp. 413-20.

 

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El imaginario manuscrito es discutido por Thomas Lathrop, «Cide Hamete Benengeli y su manuscrito», en Cervantes. Su obra y su mundo, pp. 693-705

 

75

El Quijote, I, 37, 12-14: I, Prólogo; también II, 192, 20-24: I, 37; II, 94, 24-25: II, 6. Según William T. Avery, el autor que, en opinión de Cervantes, mezclaba erróneamente «lo humano con lo divino» era Dante («Elementos dantescos del Quijote», Anales Cervantinos, tomo 9 (1961-62), 1-28, en p. 27).

 

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He procedido a la reconstrucción de la biblioteca de Cervantes más adelante en el artículo «La biblioteca de Cervantes», en Studia in honorem prof. Martín de Riquer, II (Barcelona: Quaderns Crema, 1987), 271-328. He incluido en él otros libros cuya posesión por los Cervantes consta documentalmente: los libros del padre de Cervantes, que Miguel probablemente heredaría.

 

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Lo más reciente sobre esta cuestión está en Elias L. Rivers, «Cervantes y Garcilaso», en Cervantes. Su obra y su mundo, pp. 963-68 (también en Homenaje a José Manuel Blecua (Madrid: Gredos, 1983), pp. 565-70), que hace referencias a discusiones anteriores acerca de la influencia de Garcilaso sobre Cervantes. (El artículo de Blecua citado en la primera nota de Rivers está también disponible en La poesía de Garcilaso (Barcelona: Ariel, 1974), pp. 367-79.)

 

78

«Un Garcilaso sin comento» es elegido por Tomás Rodaja (la referencia está en el siguiente párrafo).

 

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Además, el guía de don Quijote en su visita a la Cueva de Montesinos, el desconcertante erudito primo, «muy aficionado a leer libros de cavallerías» (III, 277, 25-26: II, 22), también se refiere a sus libros, que parece que constituyen una pequeña biblioteca (III, 280, 6-7: II, 22).

 

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Indaga sobre esta cuestión en Cervantes, Aristotle, and the «Persiles» (Princeton: U. P., 1970). He comentado la purificación de los libros de caballerías por Cervantes en «The ideal libro de caballerías: The Bernardo», cap. 2 de mi A study of «Don Quixote» (Newark: Juan de la Cuesta, 1987). (Una versión anterior, «El Bernardo de Cervantes fue su libro de caballerías», fue publicada en Anales Cervantinos, tomo 21 (1983), 103-17).