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61

«Página personal del Director», Mercurio. Revista mensual ilustrada, Nueva Orleans, febrero de 1917, n.º 66, vol. XII, p. 1.

 

62

Ibidem.

 

63

S. Rueda, «Mi estética. I», Mercurio. Revista mensual ilustrada, Nueva Orleans, marzo-1917, n.º 67, vol. XII, pp. 75 y 76.

 

64

En 1925 Rueda recordaría de nuevo esta anécdota en una extensa carta al vallisoletano Narciso Alonso Cortés. Vid. N. Alonso Cortés, «Salvador Rueda y la poesía de su tiempo», Anales de la Universidad de Madrid, (1933), fasc. 2, II, pp. 175-177.

 

65

Años después ampliaba Rueda esta anécdota: «Me hizo reír mucho la sinceridad de este pasaje pelayodarioruedesiano, y exclamé jocosamente para alegarlo: "Si, hombre; tú eres un hombre con los brazos de ferroprusiato, las piernas de permanganato, los brazos de salicilato y el cerebro de bicarbonato; eres un hombre químico"». Ibidem, p. 177.

 

66

Esta acerada alusión al alcoholismo de Darío la repitió años después: «A fin de tenerlos más cerca de su mano, mezclaba debajo de su cama el Jerez dorado y regio, con la Manzanilla olorosa, el Priorato monacal con el Lágrima Cristi de la bella Málaga; el Moscatel de Hortaleza, pura delicia de Madrid, con el astringente Valdepeñas; el Moriles de la grave Córdoba, con el Rioja digestivo y travieso». Ibidem, p. 184.

 

67

S. Rueda, «Mi estética. I», art. cit., p. 76.

 

68

Ibidem. Este episodio fue narrado de nuevo por Rueda en 1925: «La poesía que Darío me escribió titulada Pórtico, no se designaba así; llevaba por título mi nombre, pero él se enamoró de la palabra Pórtico, y tachando el verdadero título, Salvador Rueda, escribió el anterior esdrújulo... Si Andrés González Blanco no rasgó el original del Pórtico, que le regalé, puede ver quien lo examine, al primer golpe de vista, mi nombre cruzado por una línea y encima el repetido Pórtico». Cfr. N. Alonso Cortés, art. cit., p. 176.

 

69

S. Rueda, «Mi estética. I», art. cit., pp. 75 y 76.

 

70

Ibidem, p. 75. R. A. Cardwell ya demostró que «Darío y Rueda representaron unos "modernismos" completamente diferentes». Cfr. R. A. Cardwell, «Rubén Darío y Salvador Rueda. Dos versiones del modernismo», Revista de Literatura, XLV, 89 (1983), pp. 52-72.