Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

11

Las Musas le regalan a Mnemosina una rama de laurel-rosa, árbol de la sabiduría apolínea, de la memoria profética, del conocimiento de los misterios, de lo invisible. Este atributo de Apolo es el origen del espíritu analógico que fundamenta la elaboración de símbolos y, en retórica la de las metáforas, es decir de lo himético (cf. Vernant, pp. 2-5). Se observa, pues, la riqueza semántica y referencial del concepto de lo himético que propone Herrera y Reissig.

 

12

Esta relación especular entre el poeta y el universo también pertenece al pensamiento simbolista, tal y como se lee en las teorizaciones ideorrealistas sobre poesía y arte de Saint-Pol-Roux (pseudónimo de Paul Roux (1861-1940); amigo de Rubén Darío, Ricardo Rojas y enrique Gómez Carrillo), en «Liminaire» de los Reposoirs de la Procession (París: Mercure de France, 1893). Allí se lee, por ejemplo: «La Belleza se mira en los espejos que son los hombres». Por ello, «La Belleza es una, y los espejos difieren». Y añade: «La emoción del espejo es el vagido de la obra». Y en nota explica: «La emoción es el surco de lo Verdadero». (La traducción es mía; cito por la edición de Jacques Goorma y Alistair Whyte para la editorial Rougerie, de Mortemart, Francia, de 1986, p. 147). Al concepto de ideorrealismo se refiere la reseña de Saint-Pol-Roux «Autour de la conférence de Camille Mauclair sur Maurice Maeterlinck», publicada en la sección «Reliefs» de Tablettes, Paris: Mercure de France, 1895; edic. cit., pp. 108-115.

 

13

En la introducción fechada en marzo de 1834 que abre el volumen Littérature et Philosophie mêlées, Víctor Hugo diserta sobre la diferente labor de un escritor del siglo XVIII y otro del XIX. Parte del hecho de que «Al viento filosófico [del XVIII] ha sucedido un aliento religioso; al espíritu de análisis uno de síntesis», y que «Han surgido hombres dotados de la facultad de crear y que poseen los instintos misteriosos que trazan el sendero hacia el genio». Así, prosigue Víctor Hugo, «Los poëtas [sic] han realizado esa tarea tal y como las abejas con la miel», «poseídos de la natural y rara inteligencia de las abejas», logrando para la lengua francesa un color que le diera «cuerpo y sabor» nuevos. Esos poëtas, poietas, formaron «el fermento del futuro», partiendo del pasado e inmersos en el presente, ya que toda obra de arte es producto de su tiempo y que así en ella se reúnen filosofía y literatura. (Cito por las Oeuvres complètes, volumen n.° 3, en una nueva edición parisiense revisada y corregida para Alexandre Houssiaux Libraire et éditeur, en 1857, p. X a XV; la traducción es mía).

 

14

Cf. Diógenes Laercio, Vidas, doctrinas y sentencias de filósofos ilustres. Este autor cita también el Tratado del alma, de Crisipo, en el sentido de lo afirmado por Zenón de Citio. Cito por la edición de Robert Genailles para los clásicos de Garnier-Flammarion, (1985, 1994, p. 66 y ss.; la traducción es mía).

 

15

El ya citado Saint-Pol-Roux y su enfoque ideorrealista, afirma que «las ideas plasticisan y vuelven convexo lo que es cóncavo», y que así es porque la «teoría de los relieves» grabados en la cera de la creación poética simbolista. Cf. Prólogo a Tablettes. 1885-1895. Vers et poésie (edic. cit., pp. 7-8).

 

16

Interesante sería poner en perspectiva el título de Herrera y Reissig con ciertos ensayos que se leían a finales del siglo XIX y principios del XX, como Psychologie comme science fondée sur l'expérience, la métaphysique et les mathématiques (1824-1825), de Johan Herbart; de Théodule Ribot, Psychologie des sentiments (1896); de Franz Brentano, Psychologie d'un point de vue empirique (1874). Se les puede añadir de Gustave Le Bon, Psychologie des foules, 1895, que distribuía la editorial Alcan, muy difundida en el Río de la Plata; El sueño y su interpretación, de Sigmund Freud, de 1901, así como sus Cinco lecciones sobre psicoanálisis, de 1909, en particular la Quinta lección sobre el arte y lo sublime; y aún, de Henri Bergson, Essai sur les données immédiates de la conscience, de 1889, tesis de doctorado que el filósofo defendió ante la Sorbona en 1888 y que se transformó en lectura esencial de los artistas que defendían la igualdad de importancia entre lo racional y lo irracional, la libertad de la conciencia, lejos del determinismo positivista y del asociacionismo simplificador.

 

17

El «peri-sprit», como escribe Herrera y Reissig partiendo de la ortografía en inglés, es un concepto que nace con el espiritismo en la segunda mitad del siglo XIX y que designa al envoltorio del espíritu, es decir al alma desencarnada, la que posee capacidad de actuar en la materia, afirma el espiritismo. En el ámbito del ocultismo, de manera más general, sugiere también la relación inteligente entre los principios vitales y el universo creado. Con este término el poeta uruguayo insta al poeta, al lector y al crítico a que se sitúen en el centro de una poiesis de «ritmo doble» y paradógico, volcada tanto a la metafísica y al misterio del hombre, «perisprit», como al misterio de la «palabra himética», expresión ésta de la divina armonía del universo y que el hombre comparte como actor y destinatario.

 

18

Cito por la traducción de Edouard des Places para Les Belles Lettres, en 1975; 533d y e, 534a, 535e; la cita se encuentra en 533e de Ion. La traducción es mía. Sobre este aspecto de la responsabilidad del «legislador» en nombrar todo lo creado, se puede consultar el diálogo de Platón el Crátilo. Sobre esta cadena de inspiración universal, ver el 4.° Libro de Las Leyes; el interlocutor de Clinias alude al hecho por el que el poeta, actuando como parte dinámica en ella, se vuelve el «legislador» de la Creación. Se halla «instalado sobre el trípode de la Musa», y, cuando ya no es más «dueño de su espíritu» y que deja que fluya su arte, ya no como arte de imitación sino arte de verdadera creación, de poiesis (719a-d.), entonces, allí, es «legislador», poieta.

 

19

Cf. «Psicología literaria», edic. cit., p. 102. No cabe la menor duda de que Herrera y Reissig era griego, como Rubén Darío y Óscar Wilde, en el sentido más estricto y auténtico de progresismo, decandencia y dandismo, entendidos según el criterio de sub specie aeternitatis.

 

20

Pausanias en la Descripción del Ática señala que en el ágora de Atenas existían varios pórticos: el de Zeus, el de Hermes, los del Sur y del Centro, el de los Gigantes que llevaba al templo de Teseo, el Real, cercano al cementerio del Cerámico; y el Pintado o Vario, que contaba con frescos y una estatua de Solón. (capítulos XIV-XVI). Este último pórtico es de los estoico, filosofía que saca su nombre del sitio, stoa, en el que se enseñaba y practicaba. El término pórtico plasma una tradición en la que lo simbólico se relaciona con lo religioso, con el saber, y la política. Síntesis ésta que atrajo al XIX y formó la sensibilidad decimonónica en su esencia. En la Academia, Platón enunció la trilogía de la Verdad, la Belleza y la Bondad que proviene de la armonía del universo y se refleja.