Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

1

[La página 7 reproduce el índice en el original. (N. del E.)]

 

2

Miembros del Consejo de Redacción. (N. del E.)

 

3

Miembros del Consejo de Redacción. (N. del E.)

 

4

Miembros del Consejo de Redacción. (N. del E.)

 

5

Miembros del Consejo de Redacción. (N. del E.)

 

6

Miembros del Consejo de Redacción. (N. del E.)

 

7

Queremos agradecer las sugerencias a una primera versión de este trabajo efectuadas por Javier Escrivá, José Viñals y Vicente Salas. También queremos agradecer a María Jesús Yagüe su colaboración en el análisis de los resultados ofrecidos por la Central de Balances del Banco de España.

 

8

Para un mayor conocimiento de las funciones de inversión basadas en la Q de Tobin puede verse Blanch (1987 a. y 1987 b.) y Espitia y otros.

 

9

Hay que tener en cuenta que:

IMN, = IMNt-1 + FBCFt - DAt + At

= IMNt-1 + FBCFt - AAt + At - DEt

= IMNt-1 + FBCFt - AAt + RAt

donde:

IMN: Inmovilizado material neto.

FBCF: Formación bruta del capital fijo y adquisición de terrenos.

DA: Dotación anual a amortizaciones.

A: Actualizaciones anuales del inmovilizado.

AA: Variación de la amortización acumulada.

DE: Desecho anual de equipos.

RA: Revalorización anual del activo, neta de desechos.

 

10

En los modelos de inversión basados en la Q de Tobin, el valor medio igual al supone un umbral crítico, por encima del cual se espera que la inversión crezca, siempre que se suponga que el valor marginal, que es el relevante para las decisiones de inversión, iguala al medio. Como no hay razones para esperar que este supuesto se cumpla, lo relevante son las variaciones del ratio Q medio. Cuando se utiliza una aproximación al ratio Q como la empleada por nosotros, estas razones se refuerzan con el hecho de que difícilmente puede esperarse un valor inferior a la unidad. Por consiguiente, lo relevante son sus variaciones.