271
«Alejandro Casona frente a su teatro» (entrevista de Casona con José Monleón), Primer Acto, 49, enero 1964, págs. 17-18.
272
Juan María Díez Taboada, «Introducción» a La sirena varada. La barca sin pescador, pág. 41.
273
Francisco Álvaro, ed., Valladolid, 1984, págs. 299-300.
274
A. Wallace Woolsey, «Illusion versus Reality in Some of the Plays of Alejandro Casona», Modern Language Journal, XXXVIII, 2 (1954), págs. 80-84; y Kessel Schwartz, «Reality in the Works of Alejandro Casona», Hispania, XL, 1 (1957), págs. 57- 61.
275
Joaquín de Entrambasaguas, «El teatro de Alejandro Casona», Clavileño, 4 (1950), págs. 34-36; y José Caso González, «Fantasía y realidad en el teatro de Alejandro Casona», Archivum, V, 2-3 (1955), págs. 304-318.
276
José Caso González, art. cit., pág. 311.
277
Véase el artículo de Thomas C. Turner, «Eye in the Drama of Alejandro Casona», Hispanófila, 61 (septiembre 1977), págs. 39-49. Turner comenta el papel de los ojos en la comunicación interpersonal, estudiando las referencias a ellos en las acotaciones y el diálogo de La casa de los siete balcones y otras obras como Siete gritos en el mar, Corona de amor y muerte, Las tres perfectas casadas y La llave en el desván. Comenta brevemente la comunicación de Uriel con Genoveva, con sus muertos familiares y con su padre Ramón.
278
Harold K. Moon, Alejandro Casona, óp. cit., págs. 74-75.
279
Francisco Ruiz Ramón, óp. cit., pág. 242. Gonzalo Torrente Ballester expresa la misma idea: «El pedagogo que cobija Casona en su alma impide a las más bellas de sus obras dramáticas alcanzar esa cima de la perfección poética en que el drama se justifica por sí mismo» (Teatro español contemporáneo, Madrid, Ediciones Guadarrama, 1957, pág. 207).
280
Charles H. Leighton, «Characteronymy in Casona’s La casa de los siete balcones», Hispania, LXIII, 2 (1980), págs. 342-347.