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651

[«Exiliados», corregido de la fe de erratas del original (N. del E.)]

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652

Valencia, 1838.

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653

Leyenda histórica (Barcelona, 1866).

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654

1852.

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655

[«Ésta», corregido de la fe de erratas del original (N. del E.)]

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Publicose en la Biblioteca de El Diario Mercantil, la cual ya había sacado a la luz las obras de Paul Feval y de Alejandro Dumas.

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657

(1832-1899). Natural de Cádiz y huérfano de padre. Estudió las primeras letras en Elda (Alicante) y en esta capital, el Bachillerato. Cursó la carrera de Leyes en Madrid y también Filosofía, en la Escuela Nacional, licenciándose y doctorándose en 1852 y 1853, respectivamente. Con motivo de un mitin electoral celebrado en el Teatro Real, de Madrid, después del pronunciamiento de Vicálvaro (1854), revelose notable orador. Figuró como redactor de El Tribuno y de la Soberanía Nacional. Colaboró en La Discusión (1863) año en que apareció La Democracia, fundada por él. Obtuvo por oposición la cátedra de Historia de España en la Facultad de Filosofía de la Universidad Central (1858). En el Ateneo de Madrid disertó brillantemente sobre La historia de la civilización en los cinco primeros siglos del cristianismo. Su intervención en el Parlamento con ocasión de las Constituyentes de 1869 tuvo singular relieve, sobre todo por su polémica con Manterola. Fue Ministro de Estado con Figueras y Presidente de la República al cesar Salmerón. Disertó en la Sorbona (1889). Académico de la Lengua (1880), de la Historia (1881) y de San Fernando. Murió en San Pedro de Pinatar (Murcia) el 25 de mayo de 1899. Su producción histórica, política y literaria fue muy copiosa.

BIBLIOGRAFÍA.- Sánchez del Real: Emilio Castelar, su vida, su carácter (Madrid, 1874); Francisco Cañamaque: Los oradores de 1869 (Madrid, 1887); M. Menéndez y Pelayo: Historia de los Heterodoxos (Madrid, 1898); M. Boada y Balmes: Emilio Castelar (Nueva York, 1872); J. Valera: Obras completas, t.º XXIV (Madrid, 1910); Ginés Alberola: Emilio Castelar: Memorias de un Secretario (Madrid, 1950).

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658

Así se afirma en la dedicatoria a D. Francisco García López.

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659

Volumen 70 de Las cien mejores obras de la literatura española, pág. 155.

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660

Ibídem, pág. 5.

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