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Estudio crítico
- Título:
-
Estudios de literatura hispanoamericana : Sor Juana Inés de la Cruz y otros poetas barrocos de la Colonia / Georgina Sabat de Rivers - Registro bibliográfico
- Autor:
-
Sabat de Rivers, Georgina, 1924- 2008
- Portales:
-
Biblioteca americana
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| Sor Juana Inés de la Cruz
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| Biblioteca Virtual de las Letras Mexicanas
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| Escritoras españolas
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- Materias:
-
Literatura hispanoamericana -- Historia y crítica | Poetas latinoamericanos
- Mat. aut.:
-
Juana Inés de la Cruz , Sor (1651-1695) -- Crítica e interpretación
- Fragmentos
'poesía' en la obra
: (91
coincidencias encontradas)
-
-
Parnaso antártico se recuerda por esta mujer de la época colonial que se dedicó a la alabanza de la poesía
-
Apolo se infundió en las nuestras109
y aun yo conozco en el Pirú tres damas
qu'han dado en la poesía
-
intelectuales comunes al hombre y la mujer así como el don de la poesía
-
Para Clarinda, la poesía es cifra de todo el saber del universo presentándola como madre creadora en
-
Repercussions» en marzo de 1987, donde leí este trabajo.
147
Para el Discurso en loor de la poesía
-
Cornejo Polar, Antonio, «Discurso en loor de la poesía», Lima, Universidad Nacional Mayor de San Marcos
-
Poesía Varia, Madrid, Ediciones Cátedra, 1981.
-
De la Campa, Antonio R. y Chang-Rodríguez, Raquel, Poesía hispanoamericana colonial.
-
Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, II, Madrid, Librería general de
-
Cetina tiene una poesía en tercetos que llama elegía, traducción de Tansillo, donde repite las lamentaciones
-
Balbuena, Bernardo de, La Grandeza Mexicana y apologético en alabanza de la poesía, México, Porrúa,1971
-
Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, I, Madrid, Librería general de
-
En la Respuesta se refiere a ello, pero al mismo tiempo deja bien clara su defensa a favor de la poesía
-
De ello da muestras sobre todo en el Compendio apologético de la poesía, con su conocimiento teórico
-
muchos que el bachiller manejaba a diario en lo que consideraba el oficio máximo del hombre:
«la poesía
-
Así, Isabel de Tobar, viuda y madre, realiza la entrada de la mujer en la poesía hispanoamericana, como
-
Chang-Rodríguez.
150
En los últimos años, he escrito varios trabajos que tienen que ver con la poesía
-
Antecedentes científicos en la poesía española del Siglo de Oro
-
Clarinda fuera requerida por un poeta conocido de su tiempo a escribir una alabanza en honor de la poesía
-
- I -
Cuando Bernardo de Balbuena nos dice en el Compendio apologético de la poesía
-
—50→
de poesía
-
Boscán y Garcilaso se lanzaran, lo mismo que ellos, a desbrozar los caminos tortuosos de lo que sería la poesía
-
(En la poesía de ambos, sin embargo, como veremos, y aunque la metrópolis siempre esté en el fondo, no
-
misma situación: este desvío de que hablamos, que incluso puede explicarse por la utilización de la poesía
-
Esta tradición se dejó sentir incluso en la poesía lírica que, en muchos casos, se veía como una variedad
-
«Sor Juana y su Sueño: antecedentes científicos en la poesía del Siglo de Oro», Cuadernos Hispanoamericanos
-
vacilaciones de Garcilaso no son de extrañar puesto que mucho más tarde, incluso los teóricos de la poesía
-
Los muchísimos versos que dedica la poeta en alabanza de la poesía son ensalzamiento propio al mismo
-
Apolo se infundió en las nuestras,
y aun yo conozco en el Pirú tres damas
que han dado en la poesía
-
Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, I, Madrid, Victoriano Suárez, 1911
-
Wilson, Edward M., «La estética de don García Salcedo Coronel y la poesía española del s.
-
este aspecto del poema de Amarilis, y de su coterránea Clarinda, la autora del Discurso en loor de la poesía
-
de ésta hacia Lope133 quien en ese momento representaba mejor que ningún otro poeta peninsular a la poesía
-
—140→
poesía
-
El Discurso es, como su nombre indica, una loa a la poesía, una teoría filosófica escrita en 808 versos
-
—115→
poesía
-
En ella la poeta ensalza las cualidades regeneradoras, educativas y de elevación que la poesía trae al
-
virtudes proféticas y los muchos conocimientos de todo tipo que le son precisos para merecer el don de la poesía
-
El don de la poesía abraza y cierra
por privilegio dado del altura
las ciencias y artes
-
musa del mundo de acá, Potosí que
«crece en riqueza de oro y esmeraldas» y que bebe el agua de la poesía
-
Alonso, Dámaso, «El desgarrón afectivo en la poesía de Quevedo».
-
Poesía española, Madrid, Editorial Gredos, 1957, 497-580.
-
Colombí-Monguió, Alicia de, Petrarquismo peruano: Diego Dávalos y Figueroa y la poesía de la «Miscelánea
-
amor cortés, porque es
este un poema de decepción amorosa donde paródicamente se vuelve al envés la poesía
-
intertextualidad con la mención del mismo Garcilaso, al hacer burla de los textos «sacros» y el ritual de la poesía
-
.
349
En los últimos años, he escrito varios trabajos que tienen que ver con la poesía
-
alteridad que presenta el sujeto colonial8, de lo que se hizo en la poesía
-
Reyes (y valga este pequeño recuerdo en el año de aniversario de su nacimiento) nos dice que
«La poesía
-
colección no son los únicos que, en la época colonial hispanoamericana, se dedicaron al difícil arte de la poesía
-
el Viejo Mundo, que
«yo he sido a dulces musas inclinada» y que, si él es el representante de la poesía
-
la prosa; son más recientes las aportaciones, en cuanto a ediciones y estudios, en el terreno de la poesía
-
ministros del poder, que dominan una estructura técnica tan compleja como lo es la que constituye la poesía
-
letra que los identifica.
350
Véanse otras citas sobre la misma cuestión:
«La poesía
-
mismo Balbuena en el prólogo al Bernardo sobre excluir la
«historia verdadera, que no es sugeto de
poesía
-
, nos da en su poesía señales
más desenfadadas y claras.
-
Rodríguez Fernández, Mario, «El tópico de la alabanza en la poesía barroca americana», Atenea, CXLIII
-
.
——, «La poesía emblemática de Hernando Domínguez Camargo», Actas del VIII
Congreso de la Asociación
-
IV, 466.
338
Dámaso Alonso, La poesía de San Juan de la Cruz, Madrid, 1946, 301.
-
—135→
Vossler, Karl, La poesía
-
Colombí-Monguió, Alicia, «Piélagos de voz: sobre la poesía de Domínguez Camargo», Revista de Filología
-
preponderancia al oído estableciendo claramente esa ambivalencia entre ver, es decir, leer y oír la poesía
-
Rechazaba en la poesía y en la pintura el realismo pictórico que buscaba el ilusionismo plástico.
-
Era imposible esperar de un sistema de
idealismo metafísico ninguna analogía entre la poesía y, sobre
-
peyorativo que Platón le había dado a la mímesis quitando así la razón básica de censura a las artes de la poesía
-
imitación fiel del mundo exterior, lo cual, intensificado por Plutarco en relación con la pintura y la poesía
-
de febrero de 1986.
107
Hay mención de una Clarinda en el Discurso en loor de la poesía
-
, 107-119; Marcelino Menéndez y Pelayo, Historia de la poesía hispanoamericana, Madrid, 1911; J.
-
Westport-London, Greenwood Press, 1983, nota 1, 178; y Antonio R. de la Campa y Raquel Chang-Rodríguez, Poesía
-
El Discurso en loor de la poesía de Clarinda sigue la enraizada tradición peninsular (Porqueras Mayo
-
) de defensa y teorización de la poesía que ya hallamos en América a partir de Bernardo de Balbuena en
-
el Compendio apologético en alabanza de la poesía, publicado en
México en 1604 junto con su Grandeza
-
hacia la mujer al utilizar personajes femeninos ligados a la poesía
-
Al lado de nombres masculinos tradicionales importantes para la poesía, hace constar en igual número
-
«la comedia
del Cuzco y Vasquirana», la poesía nacida en la región del Potosí, la
«Indiana América»
-
ver la orilla / de un arroyuelo de cristales bellos», la vemos sentando cátedra en cuanto a lo que la poesía
-
todo, la vemos en una función ginecomorfista153 que, así como antes mencionamos, le había dado a la poesía
-
351
A María de Zayas quien también escribió poesía y quién quizá entró monja al
-
Las características que distinguen el Barroco de Indias del Barroco Peninsular, basadas en la poesía
-
Maurer se refiere a
«la descripción de los deleites sexuales [...] en la poesía francesa del XVI, tan
-
con la neolatina» (155) y, más adelante, señala que
«En España, al contrario de lo que ocurre en la poesía
-
tiene nada de burlesco.
383
Véase a Dámaso Alonso en «El desgarrón afectivo en la poesía
-
de Quevedo» (Poesía española, Madrid, Editorial Gredos, 1957, 497-508) quien analiza otro soneto todavía
-
su reconocimiento de la habilidad poética del colombiano tiene poco de generoso al califica
r a su poesía
-
Renacimiento español de Begoña López Bueno, Sevilla, 1978.
58
Véase «Flores de baria poesía
-
Uno de los más importantes era el de «Flores de baria poesía...», recopilado en la ciudad de México en
-
juventud y a
«nuestras letras mexicanas» (22), así como en el Compendio apologético en alabanza de la poesía
-
regían ese mundo19, lo primordial era la forma correcta (Zamora, 1988, 3-4, 6, 8) -trátese de prosa o de poesía
-
aquélla,
la forma, servía para traspasar el mensaje de manera persuasiva, retórica, y, sobre todo en la poesía
-
Cornejo Polar, Antonio, «Discurso en loor de la poesía», Lima, Universidad Nacional Mayor de San Marcos
-
Poesía varia, Madrid, Ediciones Cátedra, 1981.
-
Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, II, Madrid, Librería general de
- Formatos:
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- Estados Unidos1
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Resultado número:1 Estudio crítico
- Título:
- Estudios de literatura hispanoamericana : Sor Juana Inés de la Cruz y otros poetas barrocos de la Colonia / Georgina Sabat de Rivers - Registro bibliográfico
- Autor:
- Sabat de Rivers, Georgina, 1924- 2008
- Portales:
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- Materias:
- Literatura hispanoamericana -- Historia y crítica | Poetas latinoamericanos
- Mat. aut.:
- Juana Inés de la Cruz , Sor (1651-1695) -- Crítica e interpretación
- Fragmentos 'poesía' en la obra : (91 coincidencias encontradas)
-
- Parnaso antártico se recuerda por esta mujer de la época colonial que se dedicó a la alabanza de la poesía
- Apolo se infundió en las nuestras109 y aun yo conozco en el Pirú tres damas qu'han dado en la poesía
- intelectuales comunes al hombre y la mujer así como el don de la poesía
- Para Clarinda, la poesía es cifra de todo el saber del universo presentándola como madre creadora en
- Repercussions» en marzo de 1987, donde leí este trabajo. 147 Para el Discurso en loor de la poesía
- Cornejo Polar, Antonio, «Discurso en loor de la poesía», Lima, Universidad Nacional Mayor de San Marcos
- Poesía Varia, Madrid, Ediciones Cátedra, 1981.
- De la Campa, Antonio R. y Chang-Rodríguez, Raquel, Poesía hispanoamericana colonial.
- Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, II, Madrid, Librería general de
- Cetina tiene una poesía en tercetos que llama elegía, traducción de Tansillo, donde repite las lamentaciones
- Balbuena, Bernardo de, La Grandeza Mexicana y apologético en alabanza de la poesía, México, Porrúa,1971
- Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, I, Madrid, Librería general de
- En la Respuesta se refiere a ello, pero al mismo tiempo deja bien clara su defensa a favor de la poesía
- De ello da muestras sobre todo en el Compendio apologético de la poesía, con su conocimiento teórico
- muchos que el bachiller manejaba a diario en lo que consideraba el oficio máximo del hombre: «la poesía
- Así, Isabel de Tobar, viuda y madre, realiza la entrada de la mujer en la poesía hispanoamericana, como
- Chang-Rodríguez. 150 En los últimos años, he escrito varios trabajos que tienen que ver con la poesía
- Antecedentes científicos en la poesía española del Siglo de Oro
- Clarinda fuera requerida por un poeta conocido de su tiempo a escribir una alabanza en honor de la poesía
- - I - Cuando Bernardo de Balbuena nos dice en el Compendio apologético de la poesía
- —50→ de poesía
- Boscán y Garcilaso se lanzaran, lo mismo que ellos, a desbrozar los caminos tortuosos de lo que sería la poesía
- (En la poesía de ambos, sin embargo, como veremos, y aunque la metrópolis siempre esté en el fondo, no
- misma situación: este desvío de que hablamos, que incluso puede explicarse por la utilización de la poesía
- Esta tradición se dejó sentir incluso en la poesía lírica que, en muchos casos, se veía como una variedad
- «Sor Juana y su Sueño: antecedentes científicos en la poesía del Siglo de Oro», Cuadernos Hispanoamericanos
- vacilaciones de Garcilaso no son de extrañar puesto que mucho más tarde, incluso los teóricos de la poesía
- Los muchísimos versos que dedica la poeta en alabanza de la poesía son ensalzamiento propio al mismo
- Apolo se infundió en las nuestras, y aun yo conozco en el Pirú tres damas que han dado en la poesía
- Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, I, Madrid, Victoriano Suárez, 1911
- Wilson, Edward M., «La estética de don García Salcedo Coronel y la poesía española del s.
- este aspecto del poema de Amarilis, y de su coterránea Clarinda, la autora del Discurso en loor de la poesía
- de ésta hacia Lope133 quien en ese momento representaba mejor que ningún otro poeta peninsular a la poesía
- —140→ poesía
- El Discurso es, como su nombre indica, una loa a la poesía, una teoría filosófica escrita en 808 versos
- —115→ poesía
- En ella la poeta ensalza las cualidades regeneradoras, educativas y de elevación que la poesía trae al
- virtudes proféticas y los muchos conocimientos de todo tipo que le son precisos para merecer el don de la poesía
- El don de la poesía abraza y cierra por privilegio dado del altura las ciencias y artes
- musa del mundo de acá, Potosí que «crece en riqueza de oro y esmeraldas» y que bebe el agua de la poesía
- Alonso, Dámaso, «El desgarrón afectivo en la poesía de Quevedo».
- Poesía española, Madrid, Editorial Gredos, 1957, 497-580.
- Colombí-Monguió, Alicia de, Petrarquismo peruano: Diego Dávalos y Figueroa y la poesía de la «Miscelánea
- amor cortés, porque es este un poema de decepción amorosa donde paródicamente se vuelve al envés la poesía
- intertextualidad con la mención del mismo Garcilaso, al hacer burla de los textos «sacros» y el ritual de la poesía
- . 349 En los últimos años, he escrito varios trabajos que tienen que ver con la poesía
- alteridad que presenta el sujeto colonial8, de lo que se hizo en la poesía
- Reyes (y valga este pequeño recuerdo en el año de aniversario de su nacimiento) nos dice que «La poesía
- colección no son los únicos que, en la época colonial hispanoamericana, se dedicaron al difícil arte de la poesía
- el Viejo Mundo, que «yo he sido a dulces musas inclinada» y que, si él es el representante de la poesía
- la prosa; son más recientes las aportaciones, en cuanto a ediciones y estudios, en el terreno de la poesía
- ministros del poder, que dominan una estructura técnica tan compleja como lo es la que constituye la poesía
- letra que los identifica. 350 Véanse otras citas sobre la misma cuestión: «La poesía
- mismo Balbuena en el prólogo al Bernardo sobre excluir la «historia verdadera, que no es sugeto de poesía
- , nos da en su poesía señales más desenfadadas y claras.
- Rodríguez Fernández, Mario, «El tópico de la alabanza en la poesía barroca americana», Atenea, CXLIII
- . ——, «La poesía emblemática de Hernando Domínguez Camargo», Actas del VIII Congreso de la Asociación
- IV, 466. 338 Dámaso Alonso, La poesía de San Juan de la Cruz, Madrid, 1946, 301.
- —135→ Vossler, Karl, La poesía
- Colombí-Monguió, Alicia, «Piélagos de voz: sobre la poesía de Domínguez Camargo», Revista de Filología
- preponderancia al oído estableciendo claramente esa ambivalencia entre ver, es decir, leer y oír la poesía
- Rechazaba en la poesía y en la pintura el realismo pictórico que buscaba el ilusionismo plástico.
- Era imposible esperar de un sistema de idealismo metafísico ninguna analogía entre la poesía y, sobre
- peyorativo que Platón le había dado a la mímesis quitando así la razón básica de censura a las artes de la poesía
- imitación fiel del mundo exterior, lo cual, intensificado por Plutarco en relación con la pintura y la poesía
- de febrero de 1986. 107 Hay mención de una Clarinda en el Discurso en loor de la poesía
- , 107-119; Marcelino Menéndez y Pelayo, Historia de la poesía hispanoamericana, Madrid, 1911; J.
- Westport-London, Greenwood Press, 1983, nota 1, 178; y Antonio R. de la Campa y Raquel Chang-Rodríguez, Poesía
- El Discurso en loor de la poesía de Clarinda sigue la enraizada tradición peninsular (Porqueras Mayo
- ) de defensa y teorización de la poesía que ya hallamos en América a partir de Bernardo de Balbuena en
- el Compendio apologético en alabanza de la poesía, publicado en México en 1604 junto con su Grandeza
- hacia la mujer al utilizar personajes femeninos ligados a la poesía
- Al lado de nombres masculinos tradicionales importantes para la poesía, hace constar en igual número
- «la comedia del Cuzco y Vasquirana», la poesía nacida en la región del Potosí, la «Indiana América»
- ver la orilla / de un arroyuelo de cristales bellos», la vemos sentando cátedra en cuanto a lo que la poesía
- todo, la vemos en una función ginecomorfista153 que, así como antes mencionamos, le había dado a la poesía
- 351 A María de Zayas quien también escribió poesía y quién quizá entró monja al
- Las características que distinguen el Barroco de Indias del Barroco Peninsular, basadas en la poesía
- Maurer se refiere a «la descripción de los deleites sexuales [...] en la poesía francesa del XVI, tan
- con la neolatina» (155) y, más adelante, señala que «En España, al contrario de lo que ocurre en la poesía
- tiene nada de burlesco. 383 Véase a Dámaso Alonso en «El desgarrón afectivo en la poesía
- de Quevedo» (Poesía española, Madrid, Editorial Gredos, 1957, 497-508) quien analiza otro soneto todavía
- su reconocimiento de la habilidad poética del colombiano tiene poco de generoso al califica r a su poesía
- Renacimiento español de Begoña López Bueno, Sevilla, 1978. 58 Véase «Flores de baria poesía
- Uno de los más importantes era el de «Flores de baria poesía...», recopilado en la ciudad de México en
- juventud y a «nuestras letras mexicanas» (22), así como en el Compendio apologético en alabanza de la poesía
- regían ese mundo19, lo primordial era la forma correcta (Zamora, 1988, 3-4, 6, 8) -trátese de prosa o de poesía
- aquélla, la forma, servía para traspasar el mensaje de manera persuasiva, retórica, y, sobre todo en la poesía
- Cornejo Polar, Antonio, «Discurso en loor de la poesía», Lima, Universidad Nacional Mayor de San Marcos
- Poesía varia, Madrid, Ediciones Cátedra, 1981.
- Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de la poesía hispanoamericana, II, Madrid, Librería general de
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